Algunas herramientas para descubrir tu lenguaje visual.
1.Antes que nada, encontrá tu temática.
Para tener un estilo definido es esencial poder responder qué tipo de fotografía querés hacer: ¿retratos? ¿conciertos? ¿editoriales? Una vez que lo sepas podés dedicarte a direccionar tu energía y procesos creativos al tipo de fotografía que elegiste trabajar.
2.Prestá atención en qué aspectos de tu vida definen tu gusto.
Cuando estás empezando lo más probable es que te digan que busques inspiración en películas y libros. Pero, ¿alguna vez prestaste atención en cómo los elementos de tu cotidiano moldean tu mirada? ¿Pensaste que el hecho de que te gusten los tonos pasteles, los documentales históricos, las plantas y la estética de los 20 afectan directamente en cómo elegís retratar el mundo? Hacé una lista de gustos que te definen y vas a descubrir cosas muy interesantes.
3.Cuantas más referencias tengas, menores serán las chances de copiarle a alguien.
Ya todes escuchamos que nada se crea de la nada y que todo en cierto nivel es una copia. Utilicemos esta idea a nuestro favor ya que las referencias son necesarias en nuestro proceso de descubrir una estética propia. Pensemos: si tu inspiración viene de dos fuentes solamente, hay más probabilidades de que tu trabajo termine como una copia de éstos que si te inspirás de veinte fuentes. Estate siempre investigando y absorbiendo nuevos trabajos. Expandir tu cantidad de fuentes permite adentrarte en un camino de creación personal más auténtico.
4.Practicar insistentemente siempre será la clave para muchas de tus dudas.
Lamento el cliché. Pero todo cliché tiene un fondo de verdad. Podés mirar decenas de tutoriales de fotografía, pero si no practicás el conocimiento absorbido, es lo mismo que no haber visto ninguno. No vas a aprender a bailar solamente mirando tutoriales sin hacer ningún paso. Bueno, la fotografía es lo mismo. Practicando vas entendiendo qué conocimientos te sirven y cuáles no y la metodología que más se encaja con tu personalidad.
5.El tiempo es tu mejor amigo.
Una estética personal es definida por la constancia del artista y dicha constancia sólo se desarrolla con el paso del tiempo. Tiempo es lo único que eventualmente te mostrará con más claridad que cualquier posteo, curso o tutorial como es tu trabajo a los ojos del mundo.
